por Irene Benito
Debido a la falta de titulares, hay subrogantes en 6 de las 11 fiscalías de la región. Un magistrado de Catamarca, Vehils Ruiz, tiene tres unidades a su cargo. Los casos de Velasco y Zoni muestran cómo los concursos quedaron desdibujados por la decisión de la Procuración de vaciar la zona norteña para cubrir cargos estratégicos en Comodoro Py.
Para entender quiénes representan al Ministerio Público Fiscal de la Nación (MPFN) en la región que constituyen las provincias de Tucumán (cabecera), Catamarca y Santiago del Estero hay que hacer un “diplomado” en intrincadas e inéditas subrogancias. En esta zona del país, que próximamente deberá aplicar la reforma procesal penal, y tal como lo reconoció el jefe del MPFN, el procurador general interino Eduardo Casal, más de la mitad (6) de las 11 fiscalías existentes están a cargo de reemplazantes. Esto es así porque la propia Procuración posterga los concursos públicos correspondientes para cubrir las vacantes o porque, cuando los celebró, se encargó de neutralizar su impacto al disponer traslados inmediatos, primero provisorios y, luego, definitivos, a unidades estratégicas de los Tribunales Federales porteños. Son los casos de los fiscales Pedro Zoni y Diego Velasco, cuyos arraigos en Comodoro Py dieron como resultado interinatos que duran decenios en Tucumán: lo que empezó como solución transitoria, devino un estatus permanente.
Las sustituciones permiten esquivar los concursos -en la última década sólo se abrió un proceso de selección para el TOF de Tucumán y ocurrió a fines del año pasado- al tiempo que generan ingresos adicionales para quienes las soportan. La Resolución 1.445/15 del MPFN dispone: “el o la fiscal que cumpla funciones transitorias a cargo de otras dependencias de inferior, igual o superior jerarquía tendrá derecho a percibir, por el período en el que realice esa tarea, una retribución suplementaria consistente en la tercera parte del sueldo correspondiente a la función ejercida” (no fue posible saber si esta era la regla más actualizada). En función de la escala salarial de diciembre de 2024, un integrante del MPFN de primera instancia percibe al menos $ 4,6 millones mensuales mientras que los servicios atinentes a las fiscalías generales y a los tribunales orales son retribuidos con $ 5,9 millones.
Otro efecto de los interinatos sin fecha de vencimiento es la concentración en pocas manos de la función acusadora y de representación de los intereses de la sociedad en la Justicia. Rafael Alberto Vehils Ruiz, fiscal ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal (TOF) de Catamarca, desempeña esa función y la de fiscal federal subrogante N° 1 de Tucumán. Desde febrero de 2025 es, además, fiscal general interino ante la Cámara Federal de Apelaciones de la región. Más allá de que es un misterio cómo hace Vehils Ruiz para multiplicarse por tres, esta situación anticipa dificultades puesto que, en el sistema procesal en vigor, el fiscal general de Apelaciones debe controlar la actuación de sus colegas de primera instancia de las tres provincias. Por ende, por un lado, en las causas donde haya un Vehils Ruiz fiscal N° 1 no podrá actuar el Vehils Ruiz fiscal general interino. Y el Vehils Ruiz titular de la unidad ante el TOF tampoco debería intervenir en los procesos que contengan su firma con el sombrero de la Fiscalía General.
La posición de poder de Vehils Ruiz se apoya sobre la discrecionalidad de Casal, quien antes no sólo lo había enviado a cubrir la Fiscalía Federal N° 2 de Catamarca en forma rotativa con el fiscal federal N° 1 de esa provincia, Santos Edgardo Reynoso, sino que también lo había nombrado interinamente en General Roca (Río Negro) con el título de fiscal coordinador y en Neuquén como fiscal jefe. A los pocos meses, Casal desarmó esta estructura patagónica y dejó solo a Reynoso con la subrogancia de primera instancia catamarqueña para que Vehils Ruiz pudiera cubrir los huecos que, con motivo de su jubilación, habían dejado Carlos Brito y Gustavo Gómez en las fiscalías N° 1 y general de Tucumán. Casal disponía de una opción de idéntica jerarquía, Indiana Garzón (TOF de Santiago del Estero), la única fiscala mujer de la región, pero prefirió a Vehils Ruiz. Garzón ya subroga la Fiscalía Federal N° 2 de Santiago a la que nunca llegó el fiscal Zoni, que había sido escogido para ese cargo y por el que incluso prestó juramento en 2014.
El caso de Zoni podría ser estudiado cómo un ejemplo de lo que el sistema judicial es capaz de hacer para torcer los concursos. Este funcionario concursó en el período en el que la Procuración estaba al mando de Alejandra Gils Carbó. En 2014, la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner lo designó en la Fiscalía Federal N° 2 de Santiago del Estero. El 29 de diciembre de aquel año, la procuradora emitió dos resoluciones: por un lado, dispuso tomarle juramento en el cargo y, por el otro, argumentó que como la fiscalía santiagueña en cuestión no estaba habilitada, Zoni quedaría asignado a la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N° 8 (Resolución 3252/14).
Así fue que Zoni consiguió quedarse a 1.000 kilómetros de distancia de donde debía originalmente prestar servicios. Nueve meses después, Gils Carbó ordenó su traslado definitivo a la unidad porteña ante una petición genérica de aquel (Resolución 2060/20). Para ese momento, la Fiscalía N° 2 de Santiago del Estero continuaba inhabilitada.
El hecho es que Gils Carbó renunció el 31 de diciembre de 2017 y que Zoni trascendió por algunas causas sensibles de Comodoro Py, como la investigación de una denuncia contra el entonces presidente Mauricio Macri por un supuesto beneficio otorgado a su grupo familiar en el conflicto por el Correo Argentino -el caso estaba en la órbita del juez federal Ariel Lijo-. Pero el 6 de abril de 2018, Casal activó las palancas para lograr, tres años y cuatro meses más tarde, que Zoni fuera a Santiago del Estero. En una resolución con repercusión en la prensa, el procurador subrogante consideró ilegítimo lo que Gils Carbó había hecho sobre la base de que había aplicado el mecanismo de traslado a un fiscal que nunca había prestado efectivamente servicios en su puesto original en Santiago del Estero.
“Al no tratarse aquí de un auténtico traslado, la decisión en examen carece del sustento normativo que se invocó en su apoyo e importó así una verdadera designación directa en otra fiscalía distinta de aquélla para la que el doctor Zoni había sido efectivamente nombrado, lo que no se encuentra entre las atribuciones conferidas a esta sede. No puede pasar inadvertido que de admitirse el procedimiento que se ha seguido respecto del doctor Zoni, quedaría desvirtuada la finalidad de los procesos de selección y nombramiento de los integrantes de este Ministerio Público”, manifestó Casal. Si bien el traslado definitivo fue revocado, Casal optó por destinar “transitoriamente” al fiscal a la unidad nacional en lo Criminal y Correccional N° 34 “hasta la habilitación de la Fiscalía N° 2 de Santiago del Estero o cuando razones de otra índole aconsejen adoptar un temperamento distinto”.
Mientras Zoni agotaba la vía administrativa y judicializaba la revocación de su traslado definitivo a la CABA, Casal aceleraba la puesta a punto de la oficina santiagueña. El 30 de septiembre de 2019, el procurador habilita la unidad y otorga 30 días a Zoni para que se haga cargo (Resolución 257/19). En el ínterin, la fiscala ante el TOF de Santiago, Garzón, queda al mando de la unidad: fue el inicio de otra situación transitoria que continúa hasta el presente.
El 31 de octubre de 2019 y en la víspera del cumplimiento del plazo, salió el sol judicial para Zoni. Enrique Lavié Pico, juez subrogante del Juzgado N° 1 en lo Contencioso Administrativo Federal, Enrique Lavié Pico emitió una medida cautelar a favor del fiscal que le permitió permanecer en la CABA hasta tanto se dicte sentencia. Es decir, sin plazo puesto que el juicio aún prosigue. Ante este blindaje, el 28 de febrero de 2020, Casal opta por poner “interinamente” a Zoni al frente de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N° 32 de la CABA (Resolución 39/2020). Diez meses después, el 28 de diciembre de 2020, Casal envía en el mismo carácter de interino a Zoni a la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N° 38 (Resolución 281/20).
El 22 de marzo de 2022, el fiscal recibió otra alegría de parte de los Tribunales en lo Contencioso Administrativo Federal. El juez N° 1, Enrique Alonso Regueira, falla a favor de Zoni mediante un pronunciamiento que se aparta de la posición de la Corte Suprema de Justicia de la Nación contraria a los traslados de la magistratura sin acuerdo del Senado expresada en el caso “Bertuzzi”. Alonso Regueira dice que la garantía de juez natural y de inamovilidad no son directamente aplicables a quienes integran el MPFN. Además, el juez advierte que, a falta de una disposición legal expresa, Casal no probó de manera adecuada que todos los traslados previos hayan sido dispuestos respecto de fiscales y fiscalas que ejercían sus cargos originales ni que haya procedido como lo hizo con Zoni en relación con aquellos que estaban en su misma situación (ver sentencia). Esta decisión está pendiente de revisión en la Sala II de la Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal. Garzón, como se dijo, sigue liderando la Fiscalía que Zoni nunca pisó y, mientras exista el litigio promovido por aquel para quedarse en Comodoro Py, no habrá un nuevo concurso para esa oficina.
Diego Velasco también fue elegido en 2014 por la exmandataria Fernández de Kirchner para la Fiscalía ante el TOF de Tucumán, pero, a diferencia de Zoni, él sí llegó a conocer la unidad para la que había concursado e incluso a ejercer como fiscal general subrogante N° 2 ante la Cámara Federal de Apelaciones, función otorgada por Gils Carbó. En total, Velasco estuvo seis meses en Tucumán, un tiempo suficiente para avalar el cierre de la primera investigación por supuesto enriquecimiento ilícito contra el entonces vicegobernador con licencia y ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur. Fue una decisión clave porque, como se sabe, el hoy senador Manzur ganó dos veces las elecciones para gobernar Tucumán y hasta llegó a asumir como jefe de Gabinete de la Nación. En su momento, Velasco dijo que con su decisión de dejar firme el sobreseimiento del funcionario aceleraba la investigación del otro tramo de las denuncias (ver publicación en La Gaceta). Antes de irse a Comodoro Py, el fiscal resolvió que esa segunda parte fuera investigada por el fiscal federal N° 2, Pablo Camuña, y no por quien había estado al frente de la primera causa, Carlos Brito (N° 1).
Para el 18 de mayo de 2015, Velasco ya había sido trasladado “en forma transitoria” a la Fiscalía N° 6 ante los Tribunales Orales en lo Criminal Federal de la Capital Federal (Resolución 1572/15) En 2016, Gils Carbó resuelve el traslado definitivo de Velasco en Comodoro Py (Resolución 434/16). Casals no sólo respetó esta política sino que la alimentó: en marzo de 2022, puso a Velasco al frente de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac) por medio de la Resolución 42/22.
Mientras tanto en Tucumán, Gils Carbó decide en 2015 que Camuña añada a la Fiscalía Federal N° 2, cargo para el que asimismo había sido nombrado por Fernández de Kirchner en 2014, previo concurso público, una subrogancia en la Fiscalía ante el TOF liberada por Velasco. Esta situación se prolonga hasta 2021, cuando el expresidente Alberto Ferńandez designa a Agustín Chit como fiscal federal N° 3. Pero, como esa oficina aún no estaba habilitada, Casal resuelve que el nuevo fiscal alivie a Camuña y se desempeñe como subrogante interino de la Fiscalía N° 2 de Tucuman (Resolución 294/21).
Al igual que en el caso de Zoni, la subrogancia en el TOF de Tucumán cumple una década en pocos meses. Es el único puesto de todos los vacantes que podría llenarse por concurso (las inscripciones cierran el 17 de marzo), aunque, después de los interinatos permanentes, este mecanismo ya no garantiza las coberturas en propiedad de cuando fue instaurado. Los interinatos eternos de Tucumán se encargaron de desdibujarlo.
Estructura: tres fiscalías de primera instancia (una inhabilitada), una fiscalía ante el TOF y una fiscalía general ante la Cámara Federal de Apelaciones.
Pablo Camuña asume como fiscal federal N° 2 en 2014. En 2015, Camuña empieza a subrogar el TOF por el traslado de Diego Velasco a la Fiscalía N° 6 ante los Tribunales Orales en lo Criminal Federal de la Capital Federal.
Agustín Chit asume como fiscal federal N° 3 en 2021. A los pocos días, Chit es nombrado como subrogante interino de la Fiscalía N° 2 de Tucumán dado que la Fiscalía N° 3 no estaba habilitada.
Rafael Alberto Vehils Ruiz, fiscal ante el TOF de Catamarca, subroga desde diciembre de 2024 la Fiscalía Federal N° 1 por la renuncia con fines jubilatorios de Carlos Brito. Desde el 1 de febrero de 2025, Vehils Ruiz subroga también la Fiscalía General ante la Cámara Federal de Apelaciones por la renuncia con fines jubilatorios de Gustavo Gómez.
Estructura: dos fiscalías de primera instancia y una fiscalía ante el TOF.
Rafael Alberto Vehils Ruiz se desempeña como fiscal ante el TOF de Catamarca desde 2015. Tuvo a su cargo numerosas subrogancias, entre ellas un reemplazo rotativo en la Fiscalía Federal N° 2 e interinatos en la Patagonia.
Santos Edgardo Reynoso es fiscal federal N° 1 desde 1995. En 2022 empezó a subrogar rotativamente el Juzgado Federal N° 2 creado por Ley 27.229 de 2015. A partir del 1 de diciembre de 2024, es el único interino por la desafectación de Vehils Ruiz.
Estructura: dos fiscalías de primera instancia y una fiscalía ante el TOF.
Eugenio Pedro Simón asume como fiscal federal N° 1 de Santiago del Estero en 2009.
Indiana Garzón asume como fiscala general ante el TOF de Santiago del Estero en 2013. Desde 2019, subroga la Fiscalía Federal N° 2 por la judicialización promovida por Pedro Zoni. Este había sido designado en Santiago del Estero en 2014, pero se quedó en Comodoro Py como consecuencia de las decisiones de la exprocuradora Alejandra Gils Carbó. La Justicia Federal en lo Contencioso Administrativo mantiene suspendida la orden del procurador interino Eduardo Casal para que Zoni preste servicios en su jurisdicción original.
Concurso del TOF de Tucumán llamado el 4-12-24
Concurso de fiscal general de 2015: Gils Carbó resuelve no seguir el 9-6-16
Concurso de fiscal N° 3 de 2014: resulta designado Agustín Chit
Concurso de fiscal N° 2 de 2013: resulta designado Pablo Camuña
Concurso de fiscal ante el TOF de 2011: resulta designado Diego Velasco